El IMDYR encara una nueva etapa a partir de la modernización en sus diferentes áreas y, ampliando
aún más su equipamiento tecnológico, aspira abrir sus puertas a todos los deportistas, no sólo
futbolistas. Ciclistas, triatletas, corredores de carreras de aventura, quienes practiquen
atletismo, natación, gimnastas, tenistas y por supuesto deportes de conjunto… a todos les damos la
bienvenida, tanto a deportistas de elite como a aquellos que buscan mejorar su salud a través de la
práctica deportiva.
El deporte actual lleva a un trabajo multidisciplinario entre médicos, entrenadores, preparadores
físicos, kinesiólogos y profesores de educación física, para lograr el máximo rendimiento cuidando
la salud del deportista, lo que permitirá una mayor longevidad deportiva.
Respondiendo a esta necesidad, el IMDYR ha actualizado su laboratorio de Fisiología del Ejercicio,
con el fin de poder brindar a los deportistas un servicio de evaluación y diagnóstico que les
permitirá a los entrenadores planificar con el respaldo de lo que la ciencia hoy les puede aportar
para enriquecer y facilitar su trabajo.
El IMDYR es un verdadero centro de “performance humana” y un Centro de Alto Rendimiento Deportivo.
Cuenta con:Una nueva máquina analizadora de gases de la respiración durante el ejercicio, que
permite la determinación, entre otras cosas, del consumo máximo de oxígeno, umbral anaeróbico,
cociente respiratorio.
Analizador de muestras de ácido láctico en sangre. Medidor de potencia y respuesta cardíaca en
bicicleta “Computrainer, el cual permite determinar posición en la cual el ciclista es más
eficiente, cadencia de pedaleo óptima y diferencias de potencia entre ambas piernas, entre otras.
Programa para determinar composición corporal (talla, peso, índice de masa corporal, porcentaje y
peso de grasa, masa muscular del deportista) Evaluación cardiológica con posibilidad de realizar
ergometrías tanto en bicicleta como en cinta.
Todo el arsenal tecnológico detallado permite individualizar al atleta para ver “cómo funciona”
cuando realiza el esfuerzo. Esto nos da una verdadera “cédula de identidad” del deportista, el
perfil metabólico, lo cual es fundamental como punto de partida y seguimiento para un proceso de
entrenamiento deportivo actual.